¿Cómo es la Comunicación Política en la Nueva Normalidad?

La comunicación política en la nueva normalidad exige a gobiernos y gobernantes una nueva forma de conectar con la ciudadanía.

Si vas a asumir una nueva responsabilidad en la función pública debes tomar en cuenta que con la pandemia del COVID19 la comunicación social de los gobiernos y la comunicación política de funcionarios y líderes ya no es la misma.

En la audiencia hay dolor, tristeza y mucha frustración por la secuela de muerte y crisis que ha dejado la pandemia del COVID19.

No es casualidad que las pasadas elecciones muchos gobernantes fueron echados del poder por su falta de capacidad para comunicar lo que hacen por su gente en el contexto de la pandemia.

Y esta tragedia está lejos de terminar.

Expertos advierten las posibilidades de una cuarta ola siguen aumentando como consecuencia del regreso a clases y la reactivación de actividades económicas que facilitan la aglomeración de personas.

Por lo tanto, la forma de comunicar de los gobernantes ha tenido que cambiar y adaptarse a una nueva normalidad que no termina de definirse.

La gente por su parte, está más pendiente que nunca de los mensajes oficiales porque de ellos depende su vida personal y productiva. Esto hace necesario una nueva visión de la comunicación institucional que ahora tiene varias características.

A continuación un panorama comunicacional en la nueva normalidad.

COMUNICACIÓN EN CRISIS

La pandemia ha provocado una profunda crisis económica sanitaria y financiera. Esto se refleja el aumento del desempleo, deuda de las familias, pobreza y escasez de recursos púbicos.

La comunicación política en la nueva normalidad debe ser clara.  Detallar las medidas para paliar y enfrentar esta crisis se vuelve fundamental para brindar confianza entre los agentes económicos. En un entorno de confianza la inversión fluye y con ello la generación de empleos, e ingresos para las familias.

COMUNICACIÓN RESILIENTE

Muchas familias están destrozadas. Necesitan un mensaje de esperanza, solidaridad, empatía e inspiración para superar los efectos devastadores que la pandemia.
No es solo ponerse en el lugar de la gente. Es darse cuenta cómo viven lo que está pasando. Ello implica una comunicación fluida que facilite el intercambio de información para mantener una atención oportuna hacia los ciudadanos.

COMUNICACIÓN POLÍTICA TRANSVERSAL

La nueva normalidad y los efectos económicos, políticos y sociales que ha dejado la pandemia exige una gestión colaborativa entre todas y cada una de las dependencias de un gobierno.

Las diferentes dependencias deben informar periódicamente a sus respectivos grupos de interés.

Evitar los esfuerzos aislados y dejar todo a las áreas de salud no favorece la comunicación institucional en situación de crisis.

COMUNICACIÓN OMNICANAL

El confinamiento aceleró la digitalización de la sociedad. La comunicación institucional o personal debe ser multiplataforma y adaptada a los diferentes formatos e interactiva con la audiencia.
Evita centrar tus esfuerzos comunicacionales en los comunicados de prensa y diversifica los canales y plataformas para enviar el mensaje que está esperando la gente para tomar desiciones.